- Ofrecerles un medio de autoabastecimiento
- Enseñarles la horticultura como un oficio
- Generar un espacio de confianza y compañerismo como apoyo en sus procesos personales y sociales
Después de las clases teóricas y una vez que dejó de llover, nos encontramos ya sobre el terreno, en un espacio facilitado gratuitamente para este fin, en el municipio de Bunyola.
Los primeros sabados el trabajo consistió en limpiar el terreno y hacer las paradas. Con la dirección de Juanjo e Inma, el equipo fué aprendiendo paso a paso a hacer las medidas, excavar y remover la tierra. Posteriormente colocaron con carretillas el compost que se facilitó en la misma finca.
A continuación sembraron las semillas, aprendiendo las características y necesiades de cada planta. Un momento especial para la conversación y compartir.
A media mañana compartimos bocatas y tuvimos la oportunidad de hacer dinamicas de trabajo en equipo.
El huerto ha florecido así como nuestra ilusión. Este 30 de junio termina la formación y las personas segirán viniendo a cuidarlo y recolectar sus frutos.
esta experiencia nos ha demostrado cómo se pueden lograr objetivos, con la colaboración de un equipo integrado y motivado.
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